sábado, 23 de noviembre de 2013

Mercancía sensible

En la caja habia corcho del que se utiliza para las cosas frágiles, dejó la mercancía con cuidado y la cubrió con más de aquel material. Cerró la caja y la selló con cinta adhesiva.

- Señor, el funcionamiento de la caja fuerte...
- No se preocupe.
- Es que no podrá abrirla.
- He dicho que no se preocupe.

Mientras cerraba la caja fuerte con la pequeña caja dentro sintió un vacio. Un sonido metálico le indicó que ya no podría volver a abrirla. No barajó otras opciones, vivir con el corazón en una prisión tampoco iba a ser tan malo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario