"¿Estás mirándome?"
"Sabes que sí. Puedo ser como un camaleón que mira a dos sitios a la vez. Te voy a contar un secreto. Puedo transformarme en lo que quiera. Puedo ser ese viento indiscreto que hace bailar tu falda, ese rayo de sol que te ilumina el pelo, esa corriente de agua que juega con tus pies en playa... Ya ves, lo bueno de esto es que nunca sabes cuando estoy a tu lado."
"Eso es lo que tú te crees. Siempre noto tu presencia"
Claro, directo, conciso.
ResponderEliminarTodos queremos un viento indiscreto en algún momento...
Un saludo.