"Hay un muro a mi alrededor"
"¿Seguro?"
"Sí, sólo que el material varía dependiendo de quién se acerca. Puede ser acero, papel o un queso gruyere"
"Me encanta el queso"
"Lo mejor son los agujeros, dejan verlo casi todo"
"Siempre que uno quiera mirar"
"Se supone que tienes que estar cerca para que el muro sea de queso"
"¿A que distancia?"
"A menos de dos labios"
Vaya! ya me gustaría a mí que alguno de mis muros pudiera variar de "composición" (el hormigón no deja pasar nada...)
ResponderEliminarUn beso!